¿Te preocupa que tu hijo solo habla con muy pocas personas de confianza y evita comunicarse verbalmente en entornos donde no se encuentra seguro?

Puede que creas que el pequeño siente vergüenza o timidez, pero también puede tratarse de mutismo selectivo. El mutismo selectivo es un trastorno de ansiedad infantil poco conocido, pero significativo, que afecta la capacidad de un niño para hablar en ciertas situaciones sociales. En ocasiones se presenta como un desafío silencioso, pero en muchos casos esto no es así, ya que el niño, aunque quiera expresarse, no es capaz de hacerlo y es por eso que, en ocasiones, recurre al uso de gestos.

En este artículo de ACM Psicólogos, vamos a tratar de explicar qué es el mutismo selectivo, sus causas, síntomas y qué estrategias puedes seguir para tratar de superar este trastorno.

¿Qué es el mutismo selectivo?

Como decimos, el mutismo selectivo es un trastorno de ansiedad en el que un niño, que es capaz de hablar perfectamente y con fluidez, en algunos entornos o situaciones se muestra completamente incapaz de hablar con otras personas. A menudo, los niños con mutismo selectivo pueden hablar en casa o con personas de confianza, pero se quedan en silencio en la escuela, con amigos, en situaciones sociales o en lugares públicos.

cómo superar el mutismo selectivo

Síntomas del mutismo selectivo

El mutismo selectivo va más allá de la simple timidez y se caracteriza por la incapacidad persistente del niño para hablar en situaciones específicas durante, al menos, un mes. Entre los síntomas más comunes de este trastorno encontramos:

  • Silencio persistente: Es el síntoma más característico del mutismo selectivo. El niño evita hablar en situaciones sociales, escolares o públicas, a pesar de ser capaz de hablar con fluidez en otros entornos.
  • Evita el contacto visual: El niño evita el contacto visual con la persona que le habla.
  • Ansiedad extrema: Los niños con mutismo selectivo a menudo experimentan niveles significativos de ansiedad en situaciones en las que se espera que hablen. En algunos casos se pueden quedar “paralizados” de miedo, cuando ven que no pueden hablar.
  • Evita las multitudes
  • No es capaz de expresar sus emociones.
  • Utiliza gestos, expresiones faciales o asiente con la cabeza para lograr comunicarse, aunque a veces el niño tampoco es capaz comunicarse de esta forma.
  • Dificultades sociales. Debido al mutismo selectivo el niño puede tener dificultades para hacer amigos y participar en actividades sociales.

Causas del mutismo selectivo

Hay que entender que cada día, los niños se enfrentan a situaciones de socialización que no siempre les resultan cómodas o fáciles. Es por eso que cualquier tipo de crítica, malentendido o burla puede hacer que el niño deje de hablar e incluso que se convierta en un trastorno de mutismo selectivo. Por tanto, no hablamos de vergüenza o timidez, que sería un rasgo de su personalidad, sino de causas principalmente psicológicas derivadas de la combinación de factores biológicos, genéticos y ambientales:

  • Ansiedad. La principal causa del mutismo selectivo es la ansiedad, ya que el niño tiene miedo a ser evaluado y juzgado, quizás aquí también se esconda un problema de autoestima. Ante el miedo o presión que siente, el niño se paraliza y deja de actuar.
  • Predisposición genética. Existe evidencia de que el mutismo selectivo puede tener una base genética. Los niños que tienen familiares con trastornos de ansiedad o problemas similares pueden tener un mayor riesgo de desarrollar mutismo selectivo.
  • Experiencias traumáticas. Si el niño ha sufrido algún evento traumático, como cambios de escuela, acoso escolar o situaciones familiares difíciles, esto puede desencadenar o exacerbar el mutismo selectivo.
  • Presión excesiva. La presión excesiva para hablar en público o en determinadas situaciones sociales o incluso si se da fobia social, aumenta la ansiedad y dificulta aún más la capacidad del niño para comunicarse verbalmente. Además, hay que tener en cuenta que, entorno al 20-30% de los niños con mutismo selectivo, también tienen dificultades imperceptibles del habla, de la audición o del lenguaje u otros problemas del aprendizaje. Esto hace que el niño se sienta más ansioso, presionado e incómodo ante situaciones en las que se espera que hable.

¿Cómo podemos intervenir para tratar el mutismo selectivo?

Si tu hijo o hija presenta la capacidad para hablar en hogar con la familia, pero es incapaz de hablar en ciertas situaciones sociales y tiene tendencia a la timidez, podría tener algo que ver con el mutismo selectivo. En este caso, desde ACM Psicólogos aconsejamos:

  • Reforzar las actuaciones positivas del peque.
  • Intensificar los vínculos afectivos que pueda tener el niño y, poco a poco ir ampliando esos vínculos.
  • Realizar actividades de exposición gradual del niño siendo muy cuidadosos con sus gustos. Conforme vaya superando el miedo y reduciendo la ansiedad, el niño se irá exponiendo a más situaciones.
  • Realizar actividades de intercambio verbal.
  • Ayudarle a descubrir sus fortalezas para que mejore su confianza en sí mismo.
  • No le presiones ni le juzgues ni mucho menos le ridiculices. Ten en cuenta que si se siente señalado, tendrá más miedo y sentirá más ansiedad, además de dañar su autoestima.
  • Uso de modelaje: donde pueda ver cómo otros interactúan y así poder empezar poco a poco a expresarse con palabras que no son las suyas, sino que vienen en un guion, por lo que el contenido no puede ser juzgado. Así evitamos ese miedo a ser evaluado que es muy común en niños con mutismo selectivo.
  • Colaboración con la escuela: Es fundamental explicar al tutor del niño los problemas de mutismo selectivo para que en el colegio se puedan implementar estrategias de apoyo.

ansiedad social en niños

Atención profesional para acabar con el mutismo selectivo

En la mayoría de casos, para superar el mutismo selectivo, es indispensable contar con el apoyo de un psicólogo profesional que proporcione un tratamiento personalizado acorde a los requerimientos del pequeño.

La terapia psicológica cognitivo-conductual que ponemos en marcha en ACM Psicólogos ayuda al niño a identificar y cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento negativos asociados con la ansiedad social. Nuestro psicólogo infantil le ayudará a expresar sus sentimientos y ansiedades a través del juego. Además  le ayudará a mejorar su autoestima y a desarrollar habilidades de comunicación para superar las barreras relacionadas con el mutismo selectivo.

Si crees que tu hijo puede estar experimentando mutismo selectivo, no esperes a que esta condición desaparezca por sí sola, lo más adecuado es recurrir a un psicólogo profesional. Contacta con nosotros y pide ahora tu primera cita en nuestra clínica de psicología en el centro de Madrid. Con el tratamiento adecuado, tu hijo puede vencer al mutismo selectivo y superar sus miedos para poder comunicarse y relacionarse con los demás sin problemas.

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