Psicologia de la salud

La Psicologia de la Salud es una rama de la Psicología encargada de aquellos factores emocionales, cognitivos y conductuales que están relacionados con el inicio, la evolución o la recuperación de una enfermedad.

Precisamente, entre los objetivos de la psicologia de la salud está promover comportamientos y estilos de vida saludables que ayuden a las personas a prevenir enfermedades, a contribuir en su curación o ayudar a que se adapten a las enfermedades crónicas.

Hay muchas conductas que las personas podemos realizar para mantenernos sanos y prevenir ciertas enfermedades. En la Psicologia de la Salud a esas diferentes conductas se les denominan patógenos e inmunógenos conductuales.

1-Los patógenos conductuales

Son aquellas conductas nos hacen ser más susceptibles de padecer una enfermedad como, por ejemplo, fumar, beber alcohol, comer en exceso, sufrir estrés, dormir pocas horas, el sedentarismo, etc. Estos son factores de riesgo que predisponen a muchas enfermedades y causan un aumento en la morbimortalidad de las personas.

2-Los inmunógenos conductuales

Son las conductas que reducen nuestro riesgo de sufrir una enfermedad. Entre los inmunógenos más aceptados están: dormir de 7 a 8 horas, tomar tres comidas al día sin picar entre ellas, mantener un peso normal, practicar ejercicio físico, no fumar, meditación o relajación diaria, etc.

Estas conductas de la salud se adquieren por aprendizaje y vienen determinadas por el contexto social, el estado emocional de la persona y por las creencias educativas que la persona tenga a cerca de la salud.

Por lo general, se clasifican los ámbitos de aplicación de la Psicologia de la Salud en 4 grupos:

1-Promoción de la salud

En ACM Psicólogos Madrid intervenimos en la promoción de la salud informando y educando en temáticas relevantes para los pacientes y buscamos el poder potenciar y fortalecer esos factores protectores, los inmunógenos conductuales, que pueden ayudar a evitar la aparición de una enfermedad.

2-Prevención de las enfermedades a través de la modificación de los malos hábitos

En ACM Psicólogos ayudamos a identificar cuáles son los factores, o también llamados patógenos conductuales, que pueden producir algún problema de salud y que se pueden evitar. Para ello, basándonos en la Psicología de la Salud, ayudamos a identificar precozmente esas conductas de riesgo para que se puedan modificar y así prevenir los problemas de salud y sus recaídas.

Dentro de la prevención, la Psicologia de la Salud permite intervenir en diferentes grados:

-Prevención primaria: que trata de disminuir los factores de riesgo y aumentar los factores que mejoran la calidad de vida de las personas.

-Secundaria: en la que el psicólogo detecta de forma precoz la enfermedad en sí y los factores psicológicos que contribuyen a ella.

-Terciaria: se da cuando el paciente recupera su salud, pero es necesario modificar las conductas para así disminuir los factores que puedan hacer que la enfermedad se cronifique.

3-Tratamiento de las enfermedades crónicas o terminales

Toda aquella enfermedad que requiere de un control permanente durante el resto de la vida (diabetes, enfermedades cardiovasculares, enfermedades renales, enfermedades neurológicas y neuromusculares, etc.) o aquellas patologías que pueden desencadenar la muerte, requieren de ayuda psicológica para mejorar en todo lo posible la efectividad del tratamiento y conseguir una adherencia al mismo.

En estos casos, en base a la Psicologia de la Salud, en ACM Psicólogos trabajamos en la evolución de la enfermedad. Y a su vez, en la forma en la que el paciente se enfrenta a la experiencia de estar enfermo.

4-Evaluación y mejora del sistema sanitario

Este cuarto ámbito de la Psicologia de la Salud se centra en el análisis y mejora del sistema sanitario. Se trata de analizar la atención sanitaria, estudiar qué se puede mejorar, cómo educar a los pacientes en el uso adecuado del sistema de salud y formar a los profesionales que dan asistencia a los pacientes para que así mejore la experiencia de los usuarios y haya una mayor humanización en este tipo de servicios.

Hoy en día, hay evidencia científica que demuestra que parte de las causas de las enfermedades radican en nuestra conducta y estilo de vida que llevamos.

En este aspecto, la Psicologia de la Salud interviene en diferentes enfermedades y patologías:

-Enfermedades cardiovasculares

Está comprobado que hay factores psicológicos que son, a su vez, factores de riesgo que contribuyen a la aparición de enfermedades cardiovasculares.

Estos factores son: el estrés psicosocial, el patrón de conducta tipo A (personalidad con alta competitividad, sobrecarga laboral, elevado sentido de la urgencia e impaciencia, hostilidad, alto nivel de aspiraciones), la depresión, la ansiedad, la ira, y otro estilo de personalidad tipo 2 de Eysenck y Gossarth-Maticek de reacción al estrés, donde describen una forma de afrontar el estrés donde las personas tienen una predominancia de la hiperexcitación, la ira y la agresividad ante respuestas de estrés.

-Cáncer

Hay ciertas conductas de riesgo como por ejemplo los sucesos vitales estresantes, las pérdidas emocionales, el duelo de un ser querido… que favorecen la indefensión y, si se tiene una forma pasiva de afrontarlos, pueden predisponer a la aparición y desarrollo de un cáncer. Y no solo eso, ya que estas conductas también influyen en el pronóstico y supervivencia con una determinada calidad de vida.

Otro factor de riesgo es el patrón de conducta tipo C descrito por Morris y Greer basado en la supresión de las emociones negativas, inhibición de la ira, ausencia de conductas hostiles, dificultad para afrontar sucesos estresantes, indefensión, desesperanza, depresión, etc. En definitiva, este tipo de conducta fomenta la vulnerabilidad frente al cáncer.

Un último factor es el tipo 1 de reacción al estrés de Eysenck y Gossarth-Maticek. Se trata de una personalidad conformista, con más dependencia hacia otras personas, que sufre estrés, reprime sus emociones, etc.

En el caso del cáncer, la Psicologia de la Salud ayuda a informar correctamente al paciente. También favorece la toma de decisiones e incrementa la adherencia a los tratamientos. De esta forma, se disminuye la vulnerabilidad personal a la enfermedad, especialmente a través del control del estrés, y aumentando los recursos personales de resistencia para afrontar la situación.

-VIH SIDA

También existen factores psicológicos que pueden ayudar a sobrellevar del mejor modo esta enfermedad o, por el contrario, dificultarla.

Hoy en día la discriminación sigue estando presente. Con el Sida se cuestionan aspectos tan esenciales, íntimos y personales como son la sexualidad o la muerte. El virus se presenta por mecanismos que habitualmente están llenos de prejuicios, además de tener que afrontar la cronicidad y el deterioro que acompaña a esta enfermedad.

La Psicologia de la Salud ofrece la posibilidad de prevenir y de tratar a las personas que ya han dado positivo. Y así, que creen condiciones que les permita desarrollar un proyecto vital.

-Trastornos gastrointestinales

Las úlceras intestinales, el intestino irritable, la enfermedad inflamatoria intestinal, la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn son algunas de las patologías gastrointestinales que se pueden afrontar desde la Psicologia de la Salud.

Se ha comprobado que en la aparición de estas patologías influye en parte la genética. Pero también, la forma de afrontar y manejar el estrés que puede iniciar, mantener o agravar la sintomatología de la enfermedad.

-Asma

Las crisis de asma pueden resultar de la influencia de estímulos de origen social o psicológico como, por ejemplo, la sugestión, reactivación de condicionamientos pasados, pensamientos, etc. que aumentan la hiperreactividad de los bronquios y provoca una hiperventilación de origen psicológico.

Por tanto, desde la Psicologia de la Salud se puede intervenir en la evolución de esta enfermedad.

-Diabetes tipo 1 y 2.

Bajo la perspectiva de la Psicologia de la Salud podemos conseguir disminuir los factores de riesgo de la diabetes tipo 2, como la depresión, el estrés, adherencia al tratamiento y los trastornos de la alimentación. Con todo ello mejora el manejo de la enfermedad evitando las posibles enfermedades asociadas.

En el caso de la diabetes tipo 1 o insulino-dependiente, la intervención va más dirigida a aprender a convivir con la enfermedad, detectar las alteraciones de glucosa en sangre, integrar y adaptar las rutinas de autocuidado en las actividades diarias, aprender cómo hacer compatible la vida social y las mediciones constantes y disponer de las habilidades sociales necesarias para sentirse fuerte ante este tipo de situaciones.

 -Dolor crónico

Aceptar la presencia del dolor constante y continuado en nuestra vida es algo muy duro. La persona tiene que incorporar en su vida las nuevas herramientas para poder gestionar el dolor y aprender a convivir con él. Y así, que pueda aceptar su presencia y a la vez disminuir en la medida de lo posible la percepción de este.

Es posible intervenir psicológicamente para ayudar a sobrellevar y mejorar este tipo de enfermedad. La relajación y aprender técnicas de distracción y manejo del dolor ayudan a disminuir los y evitar posibles problemas de ansiedad y depresión, que a su vez aumentan sus efectos y la percepción de este dolor.

-Fibromialgia

La intervención en fibromialgia pasaría por formar al paciente en estrategias de solución de problemas y habilidades para afrontar y manejar los síntomas de la enfermedad. Algunas técnicas esenciales para el buen manejo serían: técnicas de relajación, técnicas de gestión emocional y la adquisición de habilidades y rutinas que ayuden a construir una vida más gratificante para la persona (como el aumento de actividades agradables, solución de problemas, higiene del sueño, habilidades sociales, etc.)

-Dismenorrea primaria

El dolor y molestias del inicio de la menstruación también pueden beneficiarse de una intervención psicológica basada en la relajación.

-Cefaleas

Se trabajan con intervenciones psicológicas fomentando la relajación, la resolución de problemas, y el manejo de la enfermedad y sus síntomas.

-Enfermedades terminales

La Psicologia de la Salud promueve la adaptación psicológica del paciente y sus familiares al proceso de la enfermedad. El trabajo se desarrolla con el paciente y sus familiares sobre el estrés, la ansiedad, la depresión y la tristeza propia de un duelo en el que se incluye la culpa, desesperanza, insomnio, irritabilidad, etc. 

En ACM Psicólogos somos profesionales de la Psicologia de la Salud y atendemos problemas psicológicos relacionados con tu salud física para que consigas adaptarte cuanto antes a la enfermedad y a sus consecuencias, adquieras hábitos saludables, disminuya el miedo, ansiedad, tristeza y aprendas a gestionar los niveles de estrés y, en definitiva, mejores tu calidad de vida física y emocional.